Documento leído por Eliezer Morales Aragón, el día 20 de noviembre de 2015 en el auditorio Octavio Paz del Senado de la República a nombre del “Foro Petróleo y Nación”
Preámbulo obligado
Desde luego, debemos referirnos al carácter profundamente desnacionalizador y privatizador del conjunto del proceso. Esto porque implica haber desmontado, desintegrando el contenido sustancial del pacto social presente, desde 1917, en el artículo 27 Constitucional.
Todo ello se realizó al desconocer el carácter sustantivo de la propiedad de la Nación de los hidrocarburos y más en general, el galimatías jurídico armado para desarticular lo que quedaba, en rigor, un puro vestigio de las tareas de PEMEX y CFE, fundamentalmente. El objetivo fundamental fue el de abrir las puertas de los hidrocarburos a la explotación, puramente mercantil de sus actividades fundamentales. Esto significa colocar al margen los intereses de las mayorías nacionales y colocar al margen el necesario papel de promotor de un proyecto que nos represente a todos los mexicanos. En suma, se ha colocado en manos de las minorías enriquecidas de nuestro país algo que debiera ser motivo de una preocupación compartida, olvido perpetrado por la oligarquía político-económica que nos agobia.
Como una parte relevante de este proceso se han abierto las puertas de par en par de nuestros recursos naturales no renovables a la voracidad de los monstruosos complejos oligopólicos transnacionales. Estos hechos marcan ya y determinarán lo fundamental de las decisiones acerca de nuestro futuro. Esto es lo más transcendente de la reforma energética.